“No hay forma de establecer yugos desiguales”.
El Espíritu Santo exhorta a quitar de la mente la posibilidad de establecer uniones que no corresponden. ¡No hay forma!. El Señor castigó duramente a Israel cuando se unieron con gentiles.
• 2da. Corintios 6:14 No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿Y qué comunión la luz con las tinieblas?
La mitad de una manzana no se puede unir a la de una naranja, tampoco un cristiano con una mundana o viceversa.
Una cosa es la unión con un mundano antes de conocer a Dios, otra muy diferente es cuando la persona conociendo la Verdad decide unirse con un inconverso. Es pecado y traerá consecuencias.
Es un error cuando una persona pide en oración que el Señor le permita casarse con un inconverso, siempre la respuesta será no, porque está claramente escrito en su Palabra.
• Nehemías 13:25-27 Y reñí con ellos, y los maldije, y herí a algunos de ellos, y les arranqué los cabellos, y les hice jurar, diciendo: No daréis vuestras hijas a sus hijos, y no tomaréis de sus hijas para vuestros hijos, ni para vosotros mismos.
¿No pecó por esto Salomón, rey de Israel? Bien que en muchas naciones no hubo rey como él, que era amado de su Dios, y Dios lo había puesto por rey sobre todo Israel, aun a él le hicieron pecar las mujeres extranjeras.
¿Y obedeceremos a vosotros para cometer todo este mal tan grande de prevaricar contra nuestro Dios, tomando mujeres extranjeras?