La garrafa va conectada a la cocina por medio de un caño, pero en algunos casos ese caño tiene fisuras que permite la fuga del gas, arriesgando una explosión ante una pequeña llama.
El ejemplo se aplica a cristianos, a quienes el enemigo les asecha maquinando males, esperando el momento para encender una llama que los haga explotar.
Esa fuga de gas representa lo que sale del corazón, y son sentimientos malos que deberían estar guardados pero como los dejan salir, el enemigo aprovecha y se prepara para entrar en acción.
Esos sentimientos acompañados del obrar del enemigo hará que pronto la persona explote, con las correspondientes consecuencias. Lujuria, lascivia, adulterio, fornicación, ira, gritería, maledicencia, y otras manifestaciones de la carne son algunas de las fugas.
• Mateo 15:19-20 Porque del corazón salen los malos pensamientos, los homicidios, los adulterios, las fornicaciones, los hurtos, los falsos testimonios, las blasfemias. Estas cosas son las que contaminan al hombre; pero el comer con las manos sin lavar no contamina al hombre.