“Deben pedir dones. Pidan el don de sanidad”.
Las congregaciones deben pedir “el don de sanidad”, es un don de prodigio de hacer milagros. La persona con el don puede orar por una persona enferma de cualquier cosa, y ésta sanará.
Ojo, el don de sanidad es una cosa, pedir sanidad de enfermedades es otra cosa. Cualquier creyente puede pedir sanidad física porque es una promesa divina para el pueblo de Dios.
Sin embargo el don de hacer milagros sirve para manifestar el poder del Señor ante los incrédulos. El Señor puede sanar a inconversos para a través de la sanidad divina recibida puedan creer en Dios.
• 1ra. de Corintios 12:8-9 Porque a éste es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de ciencia según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu.
Atención: cualquiera que haya recibido un milagro de Dios, pero que no sigue al Señor, al contrario, vuelve atrás, puede perder la sanidad, o sea, la enfermedad volverá a manifestarse.
• Juan 5:14 Después le halló Jesús en el templo, y le dijo: Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te venga alguna cosa peor.