
Un remolino formado por aguas apareción en el piso de la congregación, y comenzó tragar muchas cosas; veía ropas, libros, diferentes instrumentos que eran succionadas.
Con este cuadro el Señor nos enseñá lo que hará con su pueblo, Él mismo quitará de golpe todo lo que su pueblo atesora, lo que ama, con lo que se afanan y no le está edificando.
Es la forma dura en que el Señor tratará con su remanente para purificarlos antes de su regreso.
- Mateo 5:29 Por tanto, si tu ojo derecho te es ocasión de caer, sácalo, y échalo de ti; pues mejor te es que se pierda uno de tus miembros, y no que todo tu cuerpo sea echado al infierno.
Debemos entender que todo lo que está en el mundo es del diablo y si no estamos sujetos al Señor en las actividades que realizamos, en todo lo que nos distrae, en la manera que usamos las cosas “del mundo” (internet, celular, televisión etc.) terminaremos influenciados por el enemigo en todo y hay muchas cosas que tienen que quitarse, cortarse de la vida del creyente, que al final ponen tropiezo en el Camino.