Este famoso predicador evangélico murió en un accidente de tránsito, y mientras orábamos por él, el Espíritu Santo reveló lo siguiente:
"Su corazón era como una piedra sellada, sin grietas, por eso no podía mi Espíritu guiarlo, ni influenciarlo. Sus obras de maldad ya había llegado hasta mi trono".
"Mi misericordia llega a hasta los cielos para los que le temen, pero para los que impíos tiene un límite. Él no se arrepentía, y Yo ya había tratado mucho con él, mas no me escuchaba”.
"Palmer solo hizo -negocio con el Nombre de Jesús-".
Dios conoce los corazones, El sabe como tratar con las personas. El hombre es tan solo un soplo, y cuando éste se suelta del Creador, muere.
Ningún impuro entrará en su reino. Se perdió por la eternidad, y en el juicio final aumentará el sufrimiento de los que se pierden cuando tengan un cuerpo de muerte.
Iglesia: “Pidan convicción”. Una vez que llegue el juicio final ya no habrá un lugar intermedio entre el cielo y el infierno (el cual es hoy la tierra), al abrirse los libros ya no habrá otro lugar para las almas, todas estarán o el cielo o el infierno.
• 1Timoteo 4:1 Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios