
El cuadro muestra una fosa con agua estancada. Con la imagen se representa el estancamiento en el crecimiento espiritual de los cristianos.
Así como el agua no corre, no fluye en el estanque… mucho pueblo de Dios se quedó donde comenzó, y como no hay un avance, entonces comienza a contaminarse.
La santificación es un proceso que no termina, tampoco puede parar, tiene que continuar hasta alcanzar la "estatura de Cristo". Cuando ese proceso "se estanca", en lugar de avanzar en la santificación, el creyente comienza a deteriorarse espiritualmente, si no hay avance en las cosas de Dios, hay contaminación... ¡es necesario el avance!. Por más que haya fe, las obras de fe deben acompañar siempre, sin esas obras de fe, el pecado vuelve a manifestarse de diferentes formas, y eso se puede percibir al igual que el hedor de un estanque con agua sucia.
- Isaías 40:31 pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas; correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.
Todos los que no leen la Palabra ya están estancados, de igual manera los que no mantienen una vida de oración. El crecimiento debe darse en el conocimiento de la Palabra, en la oración y comunión con Dios, en el apresto del evangelio, en la fe, etc.
- Josué 23:6 Esforzaos, pues, mucho en guardar y hacer todo lo que está escrito en el libro de la ley de Moisés, sin apartaros de ello ni a diestra ni a siniestra
- Santiago 1:25 Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.
- 2Corintios 3:18 Por tanto, nosotros todos, mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del Señor.